Si nos enredamos a buscar el dispositivo detector de velocidad más productivo de los que hay instalados en toda España, acabaremos casi con toda probabilidad entre los municipios de Fene y Neda, en Galicia. Concretamente en el túnel de O Sartego de la Autopista del Atlántico, en sentido Ferrol.
Dicho túnel tiene una longitud de 1200 metros, y está compuesto por uno de esos radares “inteligentes” que captan la velocidad al entrar en el túnel y al salir, efectuando el cálculo de la media empleada en recorrer el poco más de un kilómetro que supone.
Aquí viene el asunto, que no deja de ser el de siempre. Según la DGT, la función de los radares es regular la velocidad en los tramos de circulación peligrosa, para así evitar accidentes en zonas de alta densidad de vehículos. Contra esto sorprendentemente, nos encontramos que en el año 2007 el túnel del que hablamos fue considerado el segundo más seguro de toda España, según la empresa inspectora EuroTAP (RACE y RACC, entre otros). Existen otros tres túneles de envergadura similar en la zona de Guísamo al Ferrol, y éste es el más seguro, además de ser por el que más cantidad de vehículos pasan al día.
Todo esto nos apunta a la incertidumbre de la decisión de colocar en este túnel el radar. Como siempre, ¿seguridad o afán recaudatorio? La velocidad permitida será de 90 km por hora, y a partir del día 9 de enero de 2012 parece ser que la DGT empezará a sancionar concienzudamente a los infractores.
Lo que es seguro es que hay muchos puntos, en Ferrol y en el resto de España, con tramos muchísimo más peligrosos y necesitados de algún tipo de regulación de velocidad que el segundo túnel más seguro del país.
Por nuestra seguridad dirán, claro. Y la de sus bolsillos.
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